Todos hemos oído hablar de las bondades que ofrece a nuestro organismo un yogur, aunque muchos consumidores prestan especial atención cuando deben decidir si escoger un yogur probiótico o uno normal. Se suele escoger en la mayoría de los casos el probiótico, pero ¿realmente este es superior al yogur normal? Un grupo de científicos vieneses elaboraron un estudio para comparar los efectos de ambos yogures, para ello proporcionaron durante 14 días 100 gramos de yogur a 33 mujeres que formaban dos grupos, el primero compuesto por 17 mujeres, tomaron yogur probiótico, el segundo grupo lo conformaban el resto de mujeres y tomaron un yogur normal. Seguidamente aumentaron la ingesta diaria de yogur a 200 gramos durante otros 14 días. Los científicos entonces comenzaron a recabar datos que mostraran la situación inmunológica que presentaban ambos grupos, como el análisis de la actividad defensiva que mostraban las células o las sustancias que actúan de mensajeras en el sistema inmunológico. Las conclusiones obtenidas fueron las siguientes, una total evidencia sobre lo recomendable que es tomar yogures, ya que la actividad celular defensiva aumenta hasta el doble de su eficacia. Los efectos de incluir en la dieta diaria yogures son bastante rápidos, según los científicos, ya en la primera fase en la que sólo se tomaban 100 gramos de yogur durante el estudio, las defensas habían aumentado. Queda una incógnita, los científicos indican que no han encontrado una diferencia significativa en la acción ejercida por ambos productos en el organismo, quizás los efectos de los yogures probióticos son algo más duraderos. Que te decantes por los yogures probióticos o por los normales casi se podría decir que da igual, lo interesante es incluir este alimento tan beneficioso en nuestra dieta diaria.
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A mi me daban 2. Para que veáis que no se puede uno fiar de los anuncios de la tele. En una taza grande, de esas que aconsejan para la ingesta de cereales, mi madre mezclaba dos yogures de distintos sabores y, como buenamente podía, me los daba cucharadita a cucharadita intentando que comiera más de lo que dejaba esturreado por mi cara en sus intentos de darme aquellas mezclas,( a veces de dos yogures, a veces de dos petit suit y un yogurt). Por lo que cuando comenzaron a salir las variedades de distinto sabor, aquellas como fresa-plátano, piña-coco, etc... No me pillo de nuevas.
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