La pervivencia del conjunto del imperio español en América durante más de tres siglos le debió mucho al mar; es más, se sostuvo gracias a su control, más o menos efectivo, durante esos siglos. De hecho, no cabe imaginarse la expansión por el continente americano, y la estructuración de una compleja maquinaria político - administrativa para sostenerlo, sin que hubiera una conexión fluida y permanente entre la Península y sus posesiones indianas. Por eso la política naval español fue un factor importante desde el mismo comienzo. En este trabajo, su autor nos presenta el Arsenal de La Habana, en el que se han construido los grandes navíos de la Armada española del siglo XVIII, y nos relata los avatares por los que pasó en un período de cincuenta años (1700 - 1750) de existencia azarosa durante este siglo. Destaca asimismo el papel que desempeñó en la vida militar, política y económica de La Habana, ya que considera que no ha sido suficientemente resaltado su papel como astillero militar, puesto que es la mar la que condiciona la historia de Cuba. El autor pone también su atención en el papel de los asentistas que trabajaron en él y en su repercusión en miles de personas que morían y vivían en los alrededores gracias o a causa de su trabajo; y en las fortunas que se hicieron debido a la actividad del astillero. Incluye también un importante anexo que recoge datos sobre buques construidos allí, datos utilísimos para los trabajos de investigación y para solaz de los aficionados a los temas navales, ya que es muy poca la bibliografía existente sobre este importante arsenal.
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