martes, 22 de febrero de 2011

Tortilla Flat” de John Steinbeck.


En 1935 John Steinbeck recibía un galardón de los muchos que con el tiempo coronarían su trayectoria literaria. Steinbeck había escrito ese año “Tortilla Flat” situada en el sur norteamericano en un poblado de California, llamado pintorescamente “Tortilla Flat” en donde transcurre la historia que hay que decirlo por momentos se vuelve lenta y por otros aburrida, pero que al final se constituye en un relato interesante.

Danny nuestro protagonista es un ¿vividor? quizá la palabra suene grosera pero casi que no hay otra para describirlo, se mantiene alejado de trabajar y se decide a merodear por los alrededores y hacerse de alimentos no siempre obtenidos en buena ley para llevar una vida entre el vino, la holgazanería y sus amigos Pilon y Pablo a los que con el tiempo se agregará El Pirata y sus perros. Es la vida de unos hombres que no trabajan y se conforman con conseguirse un poco de comida, casi siempre restos que deja la gente, mientras habitan con Danny la casa que él ha heredado junto con otra de su abuelo. Ya los amigos de Danny de su misma actitud se ocuparán de alejarle de la señora Morales una mujer con la que aquel ha trabado amistad, temiendo que aquella se interponga entre ellos y su amigo, y la casa que les ha dado en alquiler que por cierto nunca pagan y que luego de quemar la casa se mudarán a la de Danny.

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