
El día rechaza una oruga
Por la banqueta cicatríz
Cercana poesía abstemia
¡Gran pataleo de cobertura!
Te brindé del pié
Un sacerdote
Te brinqué
Empeorando corcovado
Tú eres la mano del alba,
la brisa que despeja mi mente,
el amigo que calma mi alma
a la que entiende perfectamente.
El velero yo lo encontré en ti
y aunque sé que ha de navegar,
espero que no se aleje mucho de mi
Gracias por tu mano amiga,
amiga, gracias por tu mano,
por ser de la fresca brisa
a mi pecho el fresco halo,
gracias por tu sonrisa,
gracias mil por tu regalo.
gracias, por tu linda poesía
y por cuanto tu me has dado.
Tu a migo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario