Un joven hombre enferma y se encuentra convaleciente, así que decide hacer un viaje y su insistente hermana le pide que visite a algunos amigos en un pueblo a donde viajará, aunque está renuente el buen hombre decide entonces visitar a la señora Stappleton pero es atendido de entrada por su joven sobrina y es que la señora Stappleton tarda tanto en apersonarse a recibir al recién llegado que él debe esperar en el salón algún tiempo en compañía de la sobrina. En medio de sus pensamientos la chica curiosa empieza a preguntarle sobre su vida y contarle pormenores del lugar.
Le pregunta si conoce a su tía y cuando él informa que será la primera vez que la vea e ignora todo de ella, la joven le cuenta una historia trágica sobre la tía acaecida años atrás le refiere que la ventana permanece abierta en espera de los parientes que han muerto 3 años atrás y que Mrs. Stappleton espera (loca que está) que vuelvan un día. Todo eso empieza a deprimir al visitante pero colapsa cuando ve las imágenes de los tres hombres que la chica le ha referido que vuelven entre la bruma.
Todo parece complicarse cuando Mrs. Stappleton llega y se disculpa por la ventana diciendo que espera a su marido y hermanos que han ido a cazar, lo que confirma la suposición de Nuttel que la buena mujer debe estar y muy loca. Pero de repente ante las sombras en medio de la bruma que se acercan a la ventana y a la buena mujer sonriendo porque vuelven sus parientes (a los que él según el relato de la sobrina cree muertos) se espanta y marcha volando y aterrado de la casa sin decir adiós.
Llegan los que ni imaginan que han causado y preguntan por el que huye por el campo, a lo que la mujer explica que era un visitante que hablaba tranquilo de sus enfermedades hasta que sin más y de la nada ha salido huyendo. A esto interviene la que ya hemos descubierto imaginativa sobrina, diciendo que los perros le habrán asustado porque él le ha contado (cosa incierta totalmente) sobre una aventura que ha tenido en el Ganges y es ahí donde la entrometida e imaginativa chica empieza a hilvanar otra de sus historias.
Le pregunta si conoce a su tía y cuando él informa que será la primera vez que la vea e ignora todo de ella, la joven le cuenta una historia trágica sobre la tía acaecida años atrás le refiere que la ventana permanece abierta en espera de los parientes que han muerto 3 años atrás y que Mrs. Stappleton espera (loca que está) que vuelvan un día. Todo eso empieza a deprimir al visitante pero colapsa cuando ve las imágenes de los tres hombres que la chica le ha referido que vuelven entre la bruma.
Todo parece complicarse cuando Mrs. Stappleton llega y se disculpa por la ventana diciendo que espera a su marido y hermanos que han ido a cazar, lo que confirma la suposición de Nuttel que la buena mujer debe estar y muy loca. Pero de repente ante las sombras en medio de la bruma que se acercan a la ventana y a la buena mujer sonriendo porque vuelven sus parientes (a los que él según el relato de la sobrina cree muertos) se espanta y marcha volando y aterrado de la casa sin decir adiós.
Llegan los que ni imaginan que han causado y preguntan por el que huye por el campo, a lo que la mujer explica que era un visitante que hablaba tranquilo de sus enfermedades hasta que sin más y de la nada ha salido huyendo. A esto interviene la que ya hemos descubierto imaginativa sobrina, diciendo que los perros le habrán asustado porque él le ha contado (cosa incierta totalmente) sobre una aventura que ha tenido en el Ganges y es ahí donde la entrometida e imaginativa chica empieza a hilvanar otra de sus historias.
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